El pasado sábado 11 de Julio, hemos tenido el privilegio de disfrutar de un gran concierto del increíble Bob Dylan, en San Sebastián. “Shadows in the night” es su último trabajo, en este CD el cantautor estadounidense versiona una serie de canciones poco conocidas del mismísimo Frank Sinatra.
La organización del concierto no fue la mejor, ya que para poder entrar al recinto sólo se abrió una puerta formulándose de este modo una enorme cola en el exterior. A las 21:00 comenzó a tocar Andrés Calamaro, mientras la gente seguía entrando en la Plaza de Toros de Illumbe. A las 22:00 entró en el escenario el maravilloso Dylan, él y su banda aparecieron bajo la oscuridad, y poco a poco, se fueron poniendo unas luces tenues dando una sensación muy cálida, de ese modo y sin ninguna presentación comenzó a cantar.
Un concierto especial en el que la comunicación entre el cantante y el público fue inexistente, pero así es él, un hombre un tanto peculiar, un poeta con sus letras. Dylan hizo un descanso de aproximadamente 20-25 minutos y de ese modo continuó su actuación hasta pasadas las 00:00, a pesar de que la plaza de toros no estaba repleta, los espectadores disfrutaron de una audición muy agradable.
El artista no tocó ninguno de sus temas más conocidos, echando de menos grandes clásicos como “Like a Rolling Stones” o “Blowin in the Wind” entre otros, pero ha sido un buen concierto y un privilegio poder escuchar su voz en directo. Una leyenda viva que perdura en el tiempo.