Las puertas giratorias entran entre las frases célebres de ayer y hoy, ¡donde no nos cortamos un pelo!
Y yo me pregunto si en estos casos, se toma por tonta a la ciudadanía. ¿Será que lo somos? ¿será que el nivel político está en las últimas? El caso es que todo apunta a que funciona. En fin, que esto habla por sí sólo… ¿qué le vamos a hacer? Pues mucho, pero no nos da la gana hacerlo…