Dicen que “en época de paz, un guerrero se hiere a si mismo”.
Y razón no les falta.
Allá por 1995 llegaba a nuestras pantallas el anime de Ghost in the shell para dejarnos maravillados con todo lo que en él se ofrecía.
En Hollywood cada vez que un productor se aburre de hacer secuelas infinitas para un blockbuster veraniego, decide adentrarse en las inciertas tierras de las adaptaciones a pantalla grande de clásicos sagrados de videojuegos, comics o animes, para auto-inflingirse heridas mortales con los resultados.
Lo que hace el aburrimiento ¿eh?
En este caso, la herida no es mortal… pero casi.
—Spoilers cibernéticos en tu zona buscan robots para relación seria–
Allá por 1995 llegaba a nuestras pantallas el anime de Ghost in the shell para dejarnos maravillados con todo lo que en él se ofrecía. La estética ciberpunk, la idea de una máquina con alma, pensamientos,sueños o recuerdos… todo elementos muy novedosos que hicieron que nos quedaramos enamorados automáticamente de la cinta.
De pequeño, cuando vi el anime por primera vez, uno de los elementos que más me sorprendieron fue la poca acción que tenía… y que aún así, conseguía mantener mi interés a unos niveles muy altos sin tener que recurrir a interminables tiroteos o explosiones cada diez minutos como ocurre en el 98% del cine actual de ciencia-ficción.
Lo último que se ha sabido es que se estiman unas pérdidas en taquilla de unos 60 Millones.
Pero claro, esa es la ventaja de tener una buena historia, que no necesitas de CGI para ocultar carencias en el desarrollo.
Y tras esta breve introducción vamos a comentar que es lo que ha hecho el bueno de Rupert Sanders.
Mucho se está hablando desde su rodaje de esta adaptación…y no todo bueno.
Lo último que se ha sabido es que se estiman unas pérdidas en taquilla de unos 60 Millones.
Esto, unido a unas críticas muy dispares por parte de la prensa especializada, podría llevarnos a pensar rápidamente que esta película es más mala que un bocadillo de pelos, pero la verdad es que no sería justo.
Y ahora es cuando hago trampa y convierto esta reseña en una opinión personal. Atentos que es un trucazo.
El único problema que tiene “Ghost in the shell” es que han pasado 22 años desde su anime.
Y ésa es una bala muy difícil de esquivar.
Todo lo que ves en pantalla te recuerda a algo que ya has visto.
Desde entonces hemos visto pasar demasiadas películas que bebían de las mismas fuentes que alimentaron al anime; desde Matrix, hasta Ex-Machina , la seriaza de “WestWorld” o, incluso, la abominable Robocop, de 2014.
(por citar unas cuantas)
Y así mal.
Si le quitas la capacidad de sorpresa a una historia tan fascinante, pues no te queda nada más que un aburrido bocadillo de pan (se nota que no he merendado,¿eh?)
Todo lo que ves en pantalla te recuerda a algo que ya has visto. Es como jugar a un “adivina la película mirando un fotograma”. Por ejemplo , la forma que tienen de crear el cuerpo de Major (Scarlett Johansson) es igual que el método empleado para dar vida a los anfitriones de “WestWorld”.
Le ocurre algo similar a lo sucedido con “John Carter”: ha alimentado a tantas historias, que cuando llega su momento… no te aporta nada y la taquilla te destroza sin miramientos.
Quizá el mayor acierto de esta adaptación, que también tiene cosillas chulas, sea la calidad y potencia visual que desprende en cada escena.
No es justo, pero el tiempo es un juez más implacable que Dredd y, a veces te da la razón (Blade Runner fue un desastre en su día a nivel de recaudación y críticas), y muchas otras… te da la espalda y te deja vendido, como en este caso.
Quizá el mayor acierto de esta adaptación, que también tiene cosillas chulas, sea la calidad y potencia visual que desprende en cada escena.
En una época dominada por el cine de super-héroes y monstruos gigantes rellenos de CGI, la ciencia-ficción no tiene más opciones para triunfar que la de sorprendernos… y Ghost in the shell no lo consigue en ningún momento de sus 107 min de metraje.
Rupert Sanders, en su segunda película tras “Blancanieves y la leyenda del cazador” de 2012, recrea un futuro oscuro donde el desarrollo tecnológico ha golpeado muy fuerte y muy rápido a la sociedad que no duda en realizarse “mejoras” a cuaquier coste. El ciberpunk del anime está muy bien conseguido y el uso del slow motion para adornar algunos momentos de acción, queda realmente bien… pero volvemos a tropezar con la misma piedra: es precioso ver caer un cuerpo en una piscina al recibir un balazo en slow motion… pero ¿cuántas películas han usado ese efecto desde Matrix?
En una época dominada por el cine de super-héroes y monstruos gigantes rellenos de CGI, la ciencia-ficción no tiene más opciones para triunfar que la de sorprendernos… y Ghost in the shell no lo consigue en ningún momento de sus 107 min de metraje.
No es una mala película… pero no aporta nada nuevo a lo que ya hemos visto.
Lo Mejor: Su potencia a nivel visual y su fidelidad al anime.
Lo peor: La frialdad como nota dominante de todos sus personajes, su falta de sorpresa y frescura, y la sensación de “esto ya lo he visto en otra parte” que no te abandona. Ni que fuera un desodorante de Rexona, oiga.
Valoración : 5´5/10
Jose Incoherente
@the_morwen
Genial crítica. Me encanta cómo está redactada, engancha desde el primer momento.Me encantarían más publicaciones de este tipo