Mientras Rajoy y Merkel se dan besitos, Artur Mas se baja los pantalones

Esta semana hemos vivido dos acontecimientos cuanto menos singulares. Mientras Rajoy y Merkel se dan besitos, Artur Mas se baja los pantalones, por decirlo de una manera suave. Empezaremos hablando de la maravillosa reunión que tuvo lugar el Lunes en Santiago de Compostela entre la señora Merkel y Rajoy.

Siempre me ha generado una infinita curiosidad conocer de qué cosas hablan dos personas que no se entienden entre si.

Intentar aparentar una relación fluída entre amiguetes, realizar una ínfima parte del camino de Santiago parloteando de las cosas cotidianas  cuales dos peregrinos que se acaban de conocer en una aventura que mucha gente decide vivir de manera espiritual.


mientras Rajoy y Merkel se dan besitos y se hinchan a placenteras comilonas gallegas, Artur Mas se baja los pantalones


Dos personas, las cuales, una no tiene ni idea de alemán y la otra no tiene ni idea de castellano, pero que han generado una preciosa estampa viviendo una ruta tan respetada en mangas de camisa y “elegantes pero informales”.

La pantomima no queda ahí.

Después de los 6 agotadores y extenuantes kilómetros por tierras gallegas y de mostrar a un par de niños y personas adultas, por aquello de que no parezca que se ha evitado el tránsito de peregrinos que realmente desean cumplir con el propósito personal del camino, y Rajoy y Merkel lo hacen con todo el esfuerzo y sacrificio que requiere (me ha salido un involutario símil del mundo que nos ha tocado vivir hoy en día), llega el momento de agasajarse, darse besitos y proporcionarse placer mútuamente.

De esta manera ambos (Rajoy y Merkel) consiguen lo que quieren, sin importarles un bledo los ciudadanos que los han elegido y que son realmente por los que están ahí haciendo la pantomima y a los cuales representan.


Volvemos a la demostración en vivo de lo que se ha convertido la democracia y la sociedad de este país.


Así, la señora Merkel consigue lo que quiere, que es que sus bancos sigan recibiendo el dinero que todos los españoles pagan, y de esta manera lograr someternos a todos un poquito más, y que su eterno y fiel amigo faldero, el señor Rajoy, siga haciendo sus maravillosas (y no declaradas en su nefasto programa electoral) reformas, para que la economía española no deje de pagar a sus bancos, mientras que si sus ciudadanos se sumen en la más honda de las miserias es algo que no le interesa a ninguno de los dos.

Como contrapartida y recompensa a tal derroche de sudor y esfuerzo, la señora Merkel le garantiza al señor Rajoy el apoyo incondicional a uno de sus ministros más lamentables, el señor de Guindos, que después de una lamentable gestión, plagada de incongruencias y engaños, merece un cargo en Europa de vete tú a saber qué.

Pero está bien el asunto.


Parece ser que el señor Rajoy también se ve incapaz para llevar solo el tema de la consulta catalana, y necesita de su gran amiga alemana para que le dé un poquito de su apoyo.


Asegurando ya cargos absurdos para cuando acabe la legislatura tener una ocupación en la que pague la administración y hasta la silla se caliente sola.

En el futuro, ya nos plantearemos si ejercemos como consejero en alguna empresita privada de esas que les hemos dado algún que otro beneficio, pero de momento, para que no cante mucho, que pague la administración. Rajoy y Merkel se dan besitos y se cogen de la mano.

Y por otro lado, pues también soltamos una palmadita en la espalda al señor Rajoy con el tema de Catalunya. Esto recuerda al viejo chiste “cada cierto tiempo, se unen un gallego y un alemán para “fastidiar” al mundo”.

Parece ser que el señor Rajoy también se ve incapaz para llevar solo el tema de la consulta catalana, y necesita de su gran amiga alemana para que le dé un poquito de su apoyo.

Mientras tanto, si decides ejercer tu derecho a la manifestación y decides mostrar tu desacuerdo con las políticas del presidente, y las políticas de su querida amiga alemana, que imperan en toda Europa, que sepas que serás recibido y despedido con una buena manta de palos.


Creo que Artur Mas ya no sabe a qué altura lleva los pantalones, porque últimamente no hace más que bajárselos o ponérselos sobaqueros.


Mientras unos hacen el esfuerzo de  disfrutar del camino y de la gastronomía gallega en su plenitud, otros se esfuerzan por vivir y llevarse algo a la boca todos los días, y como guarnición una dosis de palos y porrazos en su punto.

Volvemos a la demostración en vivo de lo que se ha convertido la democracia y la sociedad de este país.

Por otro lado, el panorama en Catalunya no puede ser más entretenido.

Creo que Artur Mas ya no sabe a qué altura lleva los pantalones, porque últimamente no hace más que bajárselos o ponérselos sobaqueros. Aunque últimamente parece que Artur Mas se baja los pantalones más que otra cosa.


Artur Mas intenta extender el paraguas antes que le salpique la tormenta que se avecina.


Esto de crecerse por momentos es lo que más le gusta al señor Mas, pero igual se está dando cuenta que esto de crecer sin control y sin aplicar las leyes de la ingeniería, provoca que la gravedad haga su efecto y se acabe cayendo todo al suelo.

Y claro, ante tal vicisitud, Artur Mas se baja los pantalones una vez más.

Parece que se empieza a dar cuenta que está en un pozo del que no va a saber salir. Quiere hacer una consulta improvisada, sin concretar todos los ítems, la manera de hacerla y un sinfín de argumentos que ya detallamos en nuestro artículo Dudando de la consulta a menos de 3 meses, y como ve que va a ser bastante complicado, ya intenta extender el paraguas antes que le salpique la tormenta que se avecina.

Pero claro, sus compañeros de gobierno, aquellos que apoyan todos sus recortes y sus políticas en contra de los ciudadanos de su país para el cual quieren la independencia, ya se han plantado, y han dicho que si no se celebra la consulta, le retirarán su apoyo de gobierno.

Señor Mas, le tiembla la silla.

Para colmo de males, el padre de su formación, su mentor, su padre político como él lo definió (el mismo que si le enseñó todo lo que sabe, igual le enseñó también a amasar fortunas en el extranjero y a mentir sin pudor cuando le preguntabann por ello) ha declarado, o mejor, ha dejado entreveer que declarará en el parlament cuando le plazca, si es que le place.


si en vez de meterse en estos jardines se hubiera preocupado más del desempleo catalán, de la pobreza existente, de no estar constantemente recortando a los trabajadores públicos de la zona, de recortar en sanidad, educación y en los derechos de los catalanes, podría vivir más tranquilos y con  todas sus vestimentas en su lugar.


El molt honorable tiene bemoles hasta cuando ha dejado de ser molt honorable. En fin, burguesía catalana que sueña en tono independendiente para tener que engañar a menos gente.

Total, que el señor Artur Mas se debe levantar estos días con unos buenos dolores de cabeza.

Es posible, que si en vez de meterse en estos jardines se hubiera preocupado más del desempleo catalán, de la pobreza existente, de no estar constantemente recortando a los trabajadores públicos de la zona, de recortar en sanidad, educación y en los derechos de los catalanes, podría vivir más tranquilos y con  todas sus vestimentas en su lugar.

En fin, ya es Jueves en esta maravillosa semana, en la que mientras Rajoy y Merkel se dan besitos y se hinchan a placenteras comilonas gallegas, Artur Mas se baja los pantalones, se los sube, se los baja, y con tanto vaivén de los mismos, es posible que se tropiece por el camino y se dé un golpe de narices.

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