Las primeras técnicas de auxilios

¿Cómo distinguir cuando una persona está viva o muerta?

Lo primero que debemos hacer ante esta situación, es sentir el pulso, esto significa que el corazón todavía late.

También es necesario comprobar la respiración, este sería otro signo de vida.

Pero si por desgracia la persona accidentada estuviera muerta, ¿Cómo puedo comprobar si aún sigue con vida?

Para mayor confirmación, podemos mirarle el ojo.

Una vez que le miremos el ojo, debemos fijarnos, es decir, si la sangre en los vasos sanguíneos de la retina se ha coagulado, de ser así sería un signo definitivo de que la persona ha muerto.

Otra cosa que debemos hacer, seria comprobarle el pulso, ¿En qué consiste la comprobación del pulso?

Consiste en comprobar los latidos que se perciben en una arteria y que corresponden a los del corazón.

Pero nos preguntamos a veces, ¿Cuándo se producen las pulsaciones?

Buena pregunta, en definitiva las pulsaciones se producen por la expansión de una arteria, ocasionada por la sangre que circula a través de ella.

También nos interesaría saber que tanto niños como adultos suelen tener distintas pulsaciones por minutos, por eso os lo voy a mostrar una tabla con las pulsaciones normales:

Adultos 60-80 veces por minutos
Niños 90-100 veces por minutos
Lactantes 100-140 veces por minutos

Estas serían las pulsaciones normales que se pueden tener por minutos.

Muy Importante

Debemos tener en cuenta que para comprobar si hay pulso, lo primero que debemos hacer, es colocar los dedos índice y el pulgar a cada lado de tráquea en la parte media del cuello, y haciendo una presión muy ligera sentirá el pulso de dos arterias carótidas, es decir de derecha e izquierda, que llevan la sangre del corazón al cerebro.

Pero si no hubiera pulso, ¿ Qué debemos hacer en este caso?

Si no hubiera pulso, debemos actuar enseguida con la reanimación cardiovascular.

Reflexión

¿Qué pasos debemos seguir para realizar las técnicas de salvamento?

1º Debemos arrodillarnos ante el accidentado

2º Échele la cabeza hacia atrás y eleve la barbilla, esto le abrirá las vías respiratorias.

3º Extiéndales las piernas.

4º Colóquele el brazo que esta más cerca de usted, paralelo al cuerpo y con el codo doblado formando dos ángulos rectos, mientras que el otro brazo descansa sobre el cuerpo.

5º Doble el otro brazo por encima del pecho de manera que el dorso de la mano esté sobre la mejilla del herido.

6º Gírele tirándole hacia usted y cogiendo del muslo.

El propósito de este movimiento es mantener la cabeza, el cuello y la columna en la línea recta mientras que la pierna de arriba está doblada para impedir que el herido se de la vuelta.

7º Coja el brazo que ha quedado debajo y sáquelo, colocándolo recto y paralelo al cuerpo con la palma hacia arriba.

8ºPonga el otro brazo en ángulo recto con respecto al cuerpo.

 

Consejo

Antes de practicar la respiración artificial debemos asegúranos de que hay pulso.

Si no es así, debemos pasar a la reanimación cardiovascular.

Deberá cerrar la nariz con los dedos, colocar los labios sobre la boca e insuflar aire hasta que el tórax se eleve.

Repita este movimiento 15 veces por minutos, siga hasta que vuelva a respirar.

Póngalo en posición de recuperación.

Si se trata de un bebé, colóquelo igualmente en la posición indicada, es decir boca arriba con la cabeza hacia atrás y la mandíbula hacia arriba.

Coloque los labios sobre la boca y tape la nariz del herido e insufle aire hasta que el tórax se eleve. Retire la boca y deje que el tórax descienda.

Continue la ventilación durante un minuto.

Lleve a cabo una respiración completa cada tres segundos.

Cada minuto debe comprobar si hay pulso. Si no hay pulso o se hace más lento, es decir menos de 60 latidos por minutos, debemos llevar a cabo la reanimación cardiovascular.

Compruebe si el accidentado respira acercando la oreja a su nariz o boca y escuchando los ruidos que produce, también debemos observar si se mueve el tórax o el abdomen.

Si no es así, colóquelo con la espalda sobre una superficie dura y despeje las vías respiratorias, retirando cualquier obstrucción. Tire de la lengua con un pañuelo o trozo de tela limpios.

Para despejar las vías se debe inclinar la cabeza hacia atrás presionando sobre la frente y seguidamente eleve la barbilla con los dedos y levanta el cuello por la nuca.

También podemos poner una manta doblada bajo los hombros para que mantenga esta posición.

Si el accidentado esta traumatizado, debe tener cuidado especial con las maniobras de movilización cervical.

En este caso solo se debe abrir la mandíbula sin mover la cabeza.

Actue con mucho cuidado.

Pero si el accidentado resultara un niño pequeño, presione moderadamente.

Cuando el corazón haya empezado a latir, coloque al niño en posición de recuperación.

Pero si resulta que hay más de una persona accidentada, ¿Qué debemos hacer entonces?

Entonces en este caso sería mejor que uno haga el boca a boca, mientras el otro se dedica al masaje cardíaco.

En el caso de que se tratara de un recién nacido, debemos situar los dedos pulgares debajo de la intersección de la línea que une los pezones y el esternón.

Para bebes algo mayores, situé los dedos índice y corazón en el mismo punto y presione hacia abajo.

El esternón debe deprimirse de 1,5 a 2,5 cm.

Lleve a cabo 5 compresiones en tres segundos e insufle aire, no retire los dedos entre las compresiones.

Repita la maniobra durante un minuto y compruebe el pulso y la respiración.

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