Una película que sin duda, en algún momento de tu vida tienes que ver, una de las mejores versiones de Clint Eastwood. Su papel como director es extraordinario pero es que su puesta en escena es todavía mejor. Walt Kowalski, papel protagonizado por Clint Eastwood, representa a un señor mayor retirado, solitario y bebedor, que esconde sus recuerdos traumáticos renegando de toda su familia. Walt, se siente el único hombre blanco del vecindario de Detroit, ya que existen diferentes razas a su alrededor que no terminan de agradarle.
Es un filme basado en el racismo, en los estereotipos que nos inculcan desde pequeños y que inconsciente empleamos a diario juzgando a las personas, simplemente por su apariencia física, raza o valores políticos. Tocando diferentes temas como el racismo, la vejez, la amistad o la familia, este drama del ganador de cuatro Premios Óscar es realmente maravilloso.
Toda la película es emocionante, dura en algunas ocasiones y con escenas que pueden llamar tu atención. Sin embargo, el final es completamente inesperado.
