Como hemos comentado en algún que otro artículo, Facebook tiene una serie de políticas, como cualquier empresa, que, en algunas ocasiones, se ha destapado como una vulneración de nuestra privacidad y, en otras, les han traído más de un dolor de cabeza a los chicos de azul.
Pues bien, en el caso que hoy os traemos, nos vamos a centrar en una de sus políticas, en concreto, en la “política de nombres”. Os ponemos en situación:
La política de nombres de Facebook obliga a todos los usuarios de esta red social a que, en el momento de crearse una cuenta, se deban dar datos reales en los nombres, es decir, si te llamas David y te registras como Juan, no pasa nada, Facebook no te va a pedir el DNI para comprobarlo, sin embargo, lo que ellos entienden por un nombre “no real” es que te registre con un nombre tipo “Unicornio Azul”. Hasta aquí, todo medianamente bien, pues la finalidad de esta política es que nadie pueda registrarse con nombres falsos y utilizar las cuentas para extorsionar, provocar enfrentamientos en los grupos o lo que, en el mundo de Internet, se conoce por “trolls”. Además, con esto también se quitaban dos pájaros de un tiro porque, para el que no lo sepa, el tema de que seas una empresa y te registres en un perfil personal de Facebook, no lo llevan muy bien, porque para eso crearon las “fan page”, para eso y para reducir la visibilidad de las empresas que se registran en Facebook y se nieguen a pasar por el aro de tener que pagar a la red social, por lo tanto, si te registras en un perfil personal, con esta política de nombres, no podrás ponerte de nombre “Gabinete de Abogados” porque no es un nombre real, pero bueno, esto es un tema a parte y no queremos desviarnos.
El caso es que, dentro de esta política de nombres, Facebook no tuvo en cuenta casos como el de las personas transgénero, Drag Queens y Drag Kings y, en la última revisión de “perfiles fraudulentos”, tuvieron la mala suerte de bloquear las cuentas de un grupo de Drag Queens de San Francisco, informándoles de que debían cambiar sus nombres a “nombres reales”.
La reacción no se hizo esperar y este grupo de Drag Queens, apoyados por diversos colectivos LGTB de San Francisco, comenzaron una serie de movilizaciones y no pararon hasta conseguir una audiencia con algunos de los representantes de Facebook con el firme propósito de que se retractaran y cambiaran esta política de nombres.
Tras varias reuniones con los equipos de Facebook y por la presión ejercida en las propias redes sociales con hashtag como #mynameis, por fin, Chris Cox, el Chief Product de Facebook, ha pedido disculpas públicamente a todos aquellos colectivos que se hayan podido ver afectados y ha prometido un cambio en las políticas de nombres para que un suceso como este no vuelva a ocurrir, siempre y cuando se mantenga la seguridad con la que idearon esta política.
En el colectivo LGTB de San Francisco se ha considerado toda una victoria y, tras esto, muchos colectivos como el de los artistas están recogiendo firmas para la misma causa.
Es una verdadera pena que en el siglo en el que estamos, la visibilidad LGTB aun siga siendo tan pobre como para que una gran empresa como Facebook no haya contemplado, en ningún momento, que una política como esta podría afectar a una parte de la población que EXISTE y es real y no queremos entrar con ello en la demagogia y utilizar, como últimamente se viene haciendo, con demasiada ligereza la palabra “homofobia” o “transfobia” pues creemos firmemente que este caso no es uno de ellos, creemos, como decíamos, que se trata, simplemente, que la sociedad aun obvia a la gente que compone el colectivo LGTB.
¿Qué opinas tú?.