Querido amigo:
¿Cuándo le van a poner el esparadrapo en la boca a la Sra. Aguirre? ¿A nadie en su partido le avergüenzan sus declaraciones?. Debe de tomarse algo por las mañanas, porque es imposible decir tantas tonterías y tantos insultos en tan poco tiempo. No entiendo como es posible que haya llegado a donde ha llegado, y los que la apoyan denotan también su mediocridad; en el pecado llevan la penitencia. Es cierto que mientras hablamos de ella, no hablamos de la sentencia del TC a la ley de empleo.
¿Me podrías explicar, por qué los dirigentes de los partidos que manejan el pelotón, tienen tantos miedos; de la derecha lo entiendo, siempre han montado los líos por miedo, ¿pero los llamados de izquierdas?. Miedo a formular de una vez un estado federal y terminar con todas las tonterías, que nos encantan. Cuando era joven, algunos amigos me miraban con recelo porque no defendía el «Estatut d’autonomía». Me ha parecido siempre un invento mal inventado para saltar una valla, que nadie se atrevía a saltar, que nadie se atrevía a negociar o que nadie sabía negociar.
En este país confundimos mucho los conceptos, y ahora más. Confundimos país con patria; a algunos eso les interesa y han fomentado el equívoco desde siempre. Ya sabes a quién me refiero. En Francia salen a la calle con una bandera del país y nadie les mira raro. Aquí le llamamos «facha».. No soy de llevar enseñas, nunca me ha gustado ir uniformado; en alguna ocasión lo he hecho por trabajo y me molestaba. Nos han confundido con lo de la españolada y lo de los estandartes. Por cierto, nunca me han importado los apelativos, me llamen como me llamen: me importa muy poco.
Hoy un grupo de INTELECTUALES, nada sospechosos, han dado un paso al frente por el federalismo: ellos han demostrado amplitud y libertad de miras.
La diferencia entre estupidez y genialidad es
que la genialidad tiene sus limites.
Albert Eistein