Una de las preguntas que más nos asaltan hoy día es cómo evitar la ansiedad. Vivimos en un mundo basado en la vorágine, en la que los horarios laborales ocupan gran parte de nuestro día sin dejarnos mucho tiempo libre del cual disfrutar.
Cada día, las personas sufrimos más presión por todos lados: rendimiento laboral, incertidumbre laboral, delicadas situaciones económicas a pesar de dedicar muchas horas al trabajo, familia, relaciones sociales…
Por otro lado, nos encontramos en un mundo en el que hay sino cumples unos estándares, poco más que se te considera un fracasad@; si no viajas en tus vacaciones al extranjero, si no disfrutas de las últimas marcas, si no tienes el último modelo de coche, una casa ejemplar…
Sin querer nos hemos visto envueltos en un mundo consumista en el cual tanto tienes, tanto vales, y estas directrices no escritas provocan un estrés añadido.
Si a esto sumamos los últimos años y la crisis económica que estamos viviendo, es normal que vivamos en un contínuo estado de ansiedad, y que agotados tanto física como mentalmente, nos preguntemos constantemente cómo evitar la ansiedad, este dichoso estado que no nos deja dormir y que nos merma anímicamente, impidiendo en muchos casos llevar una vida activa y plena, padeciendo una constante infelicidad. Para ello es muy importante saber cómo evitar la ansiedad.
La idea de este texto es aportar una serie de consejos que puedes llevar a cabo y así disminuir el efecto de esa desagradable sensación y dar solución a esta pregunta que nos persigue, cómo evitar la ansiedad.
Practicar deporte: el deporte, realmente es un magnífico catalizador de la ansiedad. Cuando lo practicas, se producen endorfinas, que provocan un estado de satisfacción y bienestar ideal para combatir la ansiedad y ayudar a prevenirla.
Esto, sumado al contexto psicológico de alcanzar metas con un plus de superación y aumento de la autoestima, es un cóctel infalible contra la dichosa ansiedad.
Para que el deporte sea efectivo en la lucha contra la ansiedad, se tiene que practicar en el momento que apetezca, sin que se convierta en un sacrificio más, ni tampoco en una obligación más que sea otro plus añadido para fomentar la ansiedad.
El mejor momento para practicarlo es aquel en el que no se tengan obligaciones que puedan distraerte de tu objetivo, y que te permita disfrutar del momento.
Practicar deporte con música, a parte de ser más entretenido, te ayuda a asociar el deporte con una afición tan personal.
Por otro lado, practicar deportes al aire libre te darán una sensación de libertad y de independencia que te alejará de momentos de encierro laborales o incluso de encierros en casa debido a las tareas domésticas que hay que realizar, y para las cuales en muchas ocasiones no se dispone de mucho tiempo.
Alimentación: una alimentación sana y equilibrada, restablecerá toda la bioquímica corporal, proporcionando bienestar y disminuyendo la ansiedad.
Cuidar la alimentación es clave para que el cuerpo elimine toxinas, y por ende restablezca la energía y la concentración.
Es importante olvidarse del alcohol, y no utilizarlo para rebajar los niveles de ansiedad.
El café, en altas dosis, también puede provocarnos un plus de nerviosismo nada aconsejable para nuestros intereses.
Los fritos, pueden ser apetitosos en un momento de nerviosismo, pero no te aportarán la energía suficiente para afrontar el día con garantías, cosa que acabará pasando factura y también provocando ansiedad.
La leche caliente y las algas contienen altas dosis de triptófano, que nos ayudarán a paliar la ansiedad.
Los frutos secos, mejoran la concentración, y el chocolate también provoca un elevado estado de bienestar. La valeriana y las tilas también nos pueden servir en un momento que se nos dispare la sensación de ansiedad.
Otro factor a tener en cuenta, es intentar tomarte tu tiempo durante las comidas; masticar despacio y comer de manera tranquila, ayudará a controlar la ansiedad.
Todo ello, junto a una alimentación equilibrada rica en verduras, frutas y pescado ayudarán a evitar la ansiedad de manera muy eficiente.
Aficiones cotidianas: es muy importante intentar tener alguna afición que se pueda aplicar en el día a día, y obligarse a dedicar tiempo, por poco que sea, a desarrollarla.
La lectura, el cine, las series o incluso ir a dar un pequeño paseo puede ayudar a evitar la ansiedad.
Si te trasladas en transporte público, puede ser un buen momento para leer, aunque se apoco rato.
Comenzar a ver una película en tu smartphone también puede ayudarte a evitar la ansiedad.
En casa, también, antes de ir a dormir, o aunque sea durante media hora al día, romper con la rutina y centrar la cabeza en una afición personal, ayudará a rebajar las tensiones del día y aumentará el bienestar físico y mental.
Respirar lentamente: cuando nos asalte esta desagradable sensación, pararse un momento y concentrarse en respirar lenta y profundamente, te reconfortará y calmará sobremanera la ansiedad.
Respirar lenta y profundamente por la nariz, y exhalar lentamente por la boca ayuda a disminuir la tensión arterial y la frecuencia cardíaca, hiperoxigenando el cerebro y ayudando a rebajar la ansiedad.
Esto provocará que el cuerpo sea capaz de encarar todas las situaciones más estresantes de manera más efectiva y eficiente.
Una cosa deberías tener en cuenta. Los problemas, o tienen solución o no la tienen. Si la tienen, aplícala. Si no la tienen, no les des más vueltas. Puede parecer un consejo de lo más simplon, pero si te paras a pensarlo, y lo aplicas, tus niveles de ansiedad se rebajarán de manera considerable.
Desahogarte: Un factor que te puede ayudar de manera considerable en estos momentos de crisis es hablar con alguien.
Por norma general, tod@s tenemos en nuestra vida alguna persona más cercana que otra, con la que tenemos una confianza especial.
Hablar, explicar tus problemas y sobretodo tus sentimientos, te puede aportar unos beneficios impresionantes. Además, hablar con una persona de total confianza, puede aportar puntos de vista desconocidos, debido a la ofuscación que se vive en momentos de ansiedad y que no te permiten ver más allá de lo que tienes delante.
Hasta aquí estos consejos sencillos que cualquiera de nosotr@s podemos aplicar de manera sencilla y cotidiana para responder a nuestra pregunta cómo evitar la ansiedad.
Es muy importante entender que la ansiedad es un problema muy habitual en la sociedad de hoy día
Si aún así el problema va en aumento, o no se acaba de solucionar, una recomendación sería practicar técnicas de relajación y yoga, aunque es lógico pensar que no todas las personas tengan los recursos económicos adecuados para poder afrontar estos gastos.
De todas maneras, en los centros cívicos y locales públicos, se pueden encontrar iniciaciones al yoga por un precio bastante económico.
Y si aún así los síntomas no remiten, quizá ha llegado el momento de plantearse acudir al médico o psicólogo y que nos ayuden a localizar cuál es el problema principal, y nos dicten las pautas o la medicación adecuadas en nuestro caso.
Es muy importante entender que la ansiedad es un problema muy habitual en la sociedad de hoy día, y no tiene absolutamente nada de malo recurrir a ayuda profesional para solucionar este imprevisto, ya que de no hacerlo e ir en aumento, las consecuencias pueden ser mucho peores.
Esperamos haberos servido de ayuda y haberos mostrado unos consejos útiles para saber cómo evitar la ansiedad.