Soñé vivir en un único Continente, sin fronteras, sin armas, sin guerras, donde blancos, negros…gente de cualquier raza, de cualquier religión, de cualquier sexo, vivíamos en armonía, en igualdad, y en hermandad.
Este Continente estaba habitado por gente feliz, que vivía de cara a la Naturaleza, convivía con ella, la respetaba cómo se respeta a una madre, LA MADRE NATURALEZA, donde todos los seres vivos gozaban de libertad, se respetaban los animales, las plantas, la atmósfera, el suelo, el agua…
Los ríos transcurrían llevando en sus cristalinas aguas, buscando el Mar, los peces y animales de agua dulce que nos servían de alimento.
Los animales pastaban libres en el campo, en las dehesas, en las montañas , proporcionándonos la leche y carne para nuestra alimentación.
Los árboles nos proporcionaban, oxígeno, sombra, frutos con los que alimentarnos.
La Cultura, la Educación, la Sanidad eran los servicios más valorados de mi Continente.
Aunque había diversidad de culturas, de religiones y de costumbres, todos los habitantes nos comunicamos con un idioma Universal.
La gente iba feliz a sus trabajos donde eran bien considerados y bien remunerados, todas sus necesidades estaban cubiertas, alimentación, vestido, vivienda, energía, sanidad pública, educación gratuita desde la infancia hasta la Universidad.
La Cultura, el Arte en todas sus modalidades era gratuito, los artistas, músicos, escritores, pintores…eran personas muy bien consideradas y remuneradas.
Las personas gozaban en su trabajo de horarios flexibles para poder compaginar la vida familiar con la profesional y disponer de tiempo suficiente para hacer deporte, disfrutar de la Naturaleza, de la Cultura y de las Artes.
Las ciudades estaban llenas de parques, jardines y libres de coches, las oficinas, fábricas…estaban situadas fuera de la ciudad, unos trenes eléctricos, otros que funcionaban sin necesidad de energía, sólo utilizaban la de la gravedad de la Tierra, transportaban a los trabajadores a sus distintos trabajos.
En la ciudad no circulaban los coches, las personas iban a su trabajo( tiendas, cines, teatro, escuelas, guarderías, centros médicos, peluquerías, supermercados…) en bicicleta o andando.
Las energías eran renovables, limpias , baratas e inagotables; placas solares cubrían los tejados y fachadas de las casas y de las empresas. Los aerogeneradores sin palas, adornaban los campos sembrados de cultivos ecológicos.
Las casas eran inteligentes, su acristalamiento, su distribución interior y exterior, estaban diseñadas para evitar el frío del invierno y el calor del verano; tenían sensores para encender o apagar las luces, si éstas eran necesarias o no; igual ocurría con respecto a la ventilación, los medidores de CO2 eran controlados por sensores.
El agua era un elemento fundamental, nunca se desperdiciaba, hacía un recorrido o ciclo desde que entraba o salía de la vivienda; el agua de los sanitarios tenía su recorrido, el agua del lavabo o ducha se recogía para el inodoro y desde éste a la Red de alcantarillado, junto a las utilizadas en lavadora o lavavajillas.
Desde la Red de alcantarillado se conducían a una depuradora, dónde una vez depuradas y limpias servían para regar parques, césped y jardines.
Los plásticos no existían. El vidrio, la porcelana , el cartón, bolsas de tela o papel, paneles de madera eran los materiales usados en las casas y los supermercados.
Los lagos, mares, albuferas, playas, océanos estaban limpios y cristalinos.
La gente vivía feliz y cuándo eres feliz, no buscas hacer daño a los demás, no desarrollas odio ni envidia contra nadie.
Éste sueño es realizable, no es una UTOPÍA, cuándo las utopías se realizan, dejan de serlo.
Todo puede conseguirse, en este mundo con voluntad, trabajo y Amor.
No queremos vivir en un mundo de guerras , queremos un mundo en PAZ.