A por las teles

De todos es sabido, que al partido del gobierno actual, no le gusta que sus ciudadanos estén formados, se culturicen, lean, y en definitiva, estén informados, porque de esta manera se vuelven críticos, establecen criterios propios de pensamiento y sobretodo se les pueden volver en contra.


en la vorágine de ataques frontales a la cultura, esta vez ha tocado ir a por las teles.


Si por ellos fuera, la cultura sería un coto privado sólo disponible para unos pocos elegidos, que serían aquellos que concuerdan con sus ideas, poseen un alto nivel adquisitivo, y resumiendo, lees apoyan incondicionalmente, de tal manera que da igual que sean cultos, porque nunca se volverían contra ellos.

Ya son varios los ataques que ha sufrido la cultura de este país, y sobretodo, un ataque donde más duele, que es en el precio para poder acceder a ella, ya que en estos tiempos de crisis y de recortes por todos sitios, la mejor manera de vetar su alcance es haciéndola cara, para así conseguir que se convierta en una necesidad que no sea prioritaria.


La mayoría de estos canales pertenecen a grupos o tienen dentro de sus accionistas a grupos que no concuerdan mucho con la ideología del partido gobernante.


Y en la vorágine de ataques frontales a la cultura, esta vez ha tocado ir a por las teles.

Se inicia el cierre de nueve canales de televisión. Ahora van a por las teles. Nuestro punto de vista a este respecto, viene determinado por dos argumentos. El primero, es que este cierre de canales, entre los cuales se encuentran canales de series, documentales o cine, viene a ser un aviso.

La mayoría de estos canales pertenecen a grupos o tienen dentro de sus accionistas a grupos que no concuerdan mucho con la ideología del partido gobernante. Esto tiene pinta de ser un aviso a navegantes, de que como determinados canales que forman parte de las diferentes plataformas, sigan por determinados derroteros, se irán cerrando sucesivos canales hasta que su impacto sea minoritario. Y por otro lado, parece un gancho a todos aquellos amiguetes que poseen plataformas de televisión privadas, y que podrán a partir de ahora competir en mejores condiciones al verse reducida la parrilla actual de televisión (de todos es conocido exdiputados populares que se dedican al mundo de la televisión).


Parece una estrategia para marcar el territorio y decir cuidado con lo que decís


Es curiosa la velocidad con que la justicia española, tan lenta en la mayoría de ocasiones y de casos (trama gúrtel, caso del señor Blesa, caaso Noos etcétera) haya llegado a una resolución tan rápida respecto al cierre de estos canales. Además el plazo se ha de cumplir sin ningún tipo de prórroga ni siquiera recurriendo al tribunal constitucional.

También es extremadamente curioso que en puertas de elecciones europeas, se produzca el cierre de estos canales con tanta disposición. Nos parece un claro aviso acerca de como se han de comportar a partir de ahora los diferentes medios, y sobretodo no recordar las mentiras, la corrupción y el “todo vale para llegar al poder” marca de la casa del partido gobernante. Parece una estrategia para marcar el territorio y decir cuidado con lo que decís, u os iremos cerrando canales de tal manera que vuestros ingresos se vean tan mermados que no os quede otro remedio que cerrar.


En un estado democrático, quizá no estaría de más apoyar a los diferentes canales televisivos para que sigan creando puestos de trabajo


También, dado que este cierre beneficiará a determinadas plataformas de pago, no es de extrañar que alguna de ellas se encuentre enormemente agradecida a tal decisión, y colabore de una manera u otra (económica, como se va demostrando en los diversos casos judiciales abiertos, o publicitaria y de exaltación de la “excelente” labor de este gobierno tan lamentable) en la campaña política que se avecina para unas elecciones que miran de reojo, dado que sospechan que la gente no es tonta del todo y que tienen memoria para recordar todos los engaños y sufrimiento en el que nos han sumido.

También es muy curioso, que un gobierno que no hace más que alardear de sus maravillosas reformas laborales, y de que el paro ha descendido de manera paupérrima, no hagan nada por hacer que una gran cantidad de trabajadores se dirijan a echar su solicitud en las oficinas del inem.

En un estado democrático, quizá no estaría de más apoyar a los diferentes canales televisivos para que sigan creando puestos de trabajo y generando entretenimiento para una población que bastante sumida en el sufrimiento está, pero parece ser que eso no es de la incumbencia de un gobierno que solo es capaz de mirar por él y por ocupar el máximo de sillones posibles. Y sobretodo, si vienen mal dadas, ir a por las teles o a por todo lo que enturbie su demagogia y manipulación.

En definitiva, ojo y cuidado, que ahora toca ir a por las teles. Que parece ser que la cultura y la libertad de expresión está en el entrecejo de determinados gobernantes, y que no gusta que las miserias suyas se hagan públicas, porque a pesar de todo, ellos tienen que llevar la cabeza muy alta, y no hay vergüenza que valga, oiga.

Bitácora del café con leche

 

Las mentiras sin fin: El esquema Ponzi de los puestos de trabajo

No hay comentarios

Dejar respuesta